
Han pasado cinco años desde que empezó la guerra en Siria. Durante este tiempo la destrucción y la muerte han dejado al país sumido en la ruina. Un enfrentamiento que ha dado lugar a la mayor crisis migratoria y de refugiados del siglo XXI. Innumerables personas han tenido que abandonar sus hogares y millones de niños se ven afectados de la misma manera. Obligados a dejar sus casas y su país para afrontar una carrera desesperada por la libertad, huyendo de aquellos que amenazan su existencia bajo situaciones inhumanas.