
A pesar de que la modelo Irina Shayk sigue sin confirmar ni desmentir los rumores de que está esperando su primer hijo junto al actor Bradley Cooper, su participación este miércoles en el prestigioso desfile de Victoria’s Secret ha confirmado lo evidente: que la rusa luce una discreta pero ya abultada barriguita que nunca antes había tenido.
La guapa maniquí se subió a la pasarela de la prestigiosa marca de lencería para mostrar un sugerente conjunto de encaje rojo, aunque parte de su impresionante silueta quedaba cubierta por una especie de batín de lentejuelas del mismo color que disimulaba estratégicamente la zona del abdomen y redirigía toda la atención a sus piernas.